Domínguez Brito: “El respeto al medio ambiente tiene que cambiar por conciencia o por consecuencias”

SANTO DOMINGO. El ministro de Medio Ambiente está concentrado en la transformación de la gestión de los recursos naturales y la biodiversidad del país, así como en las acciones legales y burocráticas, lo que marcaría un hito en la historia del medio ambiente de la isla.

Al evaluar el estado del medio ambiente del país, Francisco Domínguez Brito dijo que los problemas cruciales siguen siendo el agua y la depredación, que durante décadas han afectado a la República Dominicana y que en determinado momento parecen irreversible.

Pero su gran apuesta para este cuatrienio es el Plan de Reforestación, que asegura será una revolución que se realizará hasta el 2020 y que su impacto se verá entre 10 a 15 años.

La inversión será superior a los RD$6,000 millones, básicamente para los programas de reforestación y de producción agrícola de San José de Ocoa, Independencia, Bahoruco, Azua, San Juan y Barahona, así como en todas las provincias de la región sur.

“Es el proyecto más ambicioso de la historia del país y se refiere a la reforestación de más de 740 mil tareas, de más de 90 millones de árboles, de los cuales más de 30 millones son especies endémicas y maderables y las demás son de productos de cultivos, como el aguacate, el café y cacao”, dijo Domínguez Brito.

El ministro de Medio Ambiente fue el invitado esta semana de Diálogo Libre, del grupo Diario Libre. Dijo que de las zonas elegidas, las más críticas son Hondo Valle y Juan Santiago, en la provincia Elías Piña.

Indicó que el país ha mantenido un crecimiento en la conservación de algunas zonas que se han cuidado y han incorporado otras protegidas, pero que el problema es más complejo, porque el hecho de ser una isla y que una parte, la de Haití, tiene 98% deforestado, les conlleva a trabajar por el bienestar medio ambiental de los dos países.

Sobre el cambio climático, dijo que las inundaciones que se están dando son producto de ese cambio. “Lo peor no son las inundaciones, sino la sequía que pueda venir como sucedió hace dos, tres años, la cual es mucho más grave que lo que se vive con el proceso de inundaciones. En ambos casos la mejor protección que se puede dar es la protección de las montañas. Es lo único. No hay mejor presa, ningún muro que se haga puede tener el efecto que las montañas sembradas”, asegura.

Indicó que no se trata de degradar el río o de hacer un muro, porque puede resolver un problema en zonas urbanas y que lo único que protege son los bosques y las área protegidas.

Atribuye a la deforestación de las montañas de la cordillera Septentrional las riadas urbanas que provocan las lluvias en esa zona del norte.

Al ministro de Medio Ambiente se le avecina un nuevo problema: enfrentar a fuertes sectores económicos que explotan la Sierra de Bahoruco.

“Allí hay gente de mucho poder que están producción y riquezas, pero habrá que tomar una decisión entre esa riqueza y el deterioro total de sierra de Bahoruco”, expuso el funcionario.

“El tema de la Sierra es económico, pero el Estado debe ser fuerte, no se puede cansar, pues tiene el poder político. Cuando hay una decisión de Estado debe cumplirse, sea allí, en Los Haitises y Valle Nuevo”, advirtió el ministro de Medio Ambiente.

Adelantó que va a doler la decisión que se tome, porque son sectores fuertes, pero van a tener que tomarla, porque nadie debe estar por encima del Estado.